El Peligro de Invocar a los Muertos o Espíritus

espiritus

Contactar con el más allá es considerado por algunos como un juego que puede resultar muy peligroso porque precisamente no trata de ningún acto lúdico ni debe ser tenida como una actividad de ocio.

Son las ganas de sentir miedo la que han llevado a muchos jóvenes a practicar la ouija con nefastas consecuencias en algunos casos. Estudiados científicamente se encuentran casos de perturbaciones mentales, sucesos paranormales en el lugar donde se ha celebrado la sesión y consecuencias poco agradables que han repercutido en las vidas de quienes han participado en ellas.

Invocar a un espíritu o intentar hablar con un familiar o persona fallecida es posible hacerlo pero teniendo en cuenta que no se trata de ningún juego y a sabiendas que quien establece la comunicación con el médium puede ser un espíritu oscuro que suplanta la identidad de ese familiar o persona ya muerta.

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No voy a entrar a explicar los diferentes niveles que se pueden alcanzar una vez que abandonamos el mundo material. Entre otras cosas porque es un hecho no demostrado, y no me refiero a la ciencia oficial que estos temas lo dejan de lado por no poderle dar una explicación basada en el método científico.

Lo cierto es que existen espíritus blancos y de luz y otros que se encuentran purgando lo malo que hayan realizado en esta vida o bien que no están aún preparados para el viaje a otro plano. Es por ello por lo que se encuentran atrapados entre dos mundos y sufriendo.

Tomarnos como una distracción el hablar con ellos es una irresponsabilidad. Siempre hay el que dice que no tiene miedo, que no cree en estas cosas y demás expresiones parecidas. A estos los querría yo ver en alguna sesión de espiritismo a la que yo he asistido.

Ojo, hay que tener cuidado también con estas sesiones puesto que a lo largo de la historia han sido muchos los farsantes que se han hecho pasar por médium para estafarle dinero a personas que se sentían con la necesidad de mantener algún vínculo con una persona fallecida.

No es este el sitio para hablar específicamente sobre la ouija. En internet podéis encontrar multitud de casos relacionados con la misma.

Los Peligros de la Ouija

Lo que yo quiero es haceros ver es que esto se trata de algo serio y que realmente existe. Que no se debe de tomar a ligera como un juego y si en el caso de que consigas dar con alguien que tenga esa capacidad llamada mediunidad tengan en cuenta que no siempre conviene molestar de su descanso a las personas que se fueron a una vida que creo mejor que esta.

Dicho todo esto os quiero hacer una salvedad. Una cosa es no aconsejar la invocación chistosa, como hacen algunos, y otra diferente una seria y por necesidad.

Pero… ¿Cuándo sabemos que realmente tenemos la necesidad de hablar con un muerto?

En algunas circunstancias la persona fallecida tiene algo que decirnos. He visto casos en los que se quería dar un mensaje a su esposa indicándole donde tenía un papel importante, por poneros un ejemplo.

Es quien ya no está con nosotros el que nos indica esa necesidad con las limitaciones propias de alguien que materialmente no se encuentra aquí en el mundo material.

Si se quieren comunicar contigo o mandarte un mensaje ten por seguro que ellos van a saber cómo hacerlo y a partir de ahí si lo deseas puedes profundizar en la comunicación.

No seas tú quien motu propio te embarques en la ventura de querer hablar con un fallecido por darte el gusto porque probablemente no lo consigas y porque además no es aconsejable. En el caso de consigas hacerlo.

A día de hoy los santeros de la religión afrocubana son los que más “levantan al muerto” como se suele decir en su jerga. A través de ellos es posible recibir esos mensajes y esos consejos para tu futuro.

No lo intentes por ti mismo porque lo más seguro es que te lleves una decepción, en el mejor de los casos, o una experiencia muy desagradable si practicas la ouija.